Cuba tiene una larga lista de atracciones y experiencias imperdibles. Si deseas dar un paso atrás en el tiempo mientras experimenta la vitalidad de la cultura cubana moderna, la histórica Plaza de la Catedral sería un gran lugar para comenzar.

La “plaza mayor” es un lugar de encuentro común en muchos países de América Latina. Las plazas son lugares de reunión para que la gente del pueblo socialice, haga negocios y se mantenga al tanto de la actualidad.

Este fenómeno social todavía existe en el Nuevo Mundo y da a muchos lugares de La Habana una sensación de estar al aire libre a través de la estructura de la plaza. Este lugar es tan especial que puedes conseguir desde una tirada de cartas del tarot, hasta un ambiente musical que te lleva a lo más profundo de su cultura.

Con fuertes raíces en la arquitectura española influenciada por elementos de diseño barroco, la Plaza de la Catedral está anclada por la Catedral de La Habana. Anteriormente, el sitio de la plaza era un pantano llamado Plaza de la Ciénaga. Eventualmente, los terrenos se drenarían y se volverían lo suficientemente adecuados para la construcción. Grandes estructuras majestuosas como la famosa Catedral y mansiones para los aristócratas cubanos se construirían aquí con el tiempo.

Un espacio con mucha historia

Una de las atracciones más populares de la Plaza es la iglesia Catedral de La Habana. La construcción del edificio duró casi 30 años, comenzando en 1748 y terminando en 1777. Las características únicas de la Catedral incluyen campanarios asimétricos y huellas de fósiles marinos conservadas en la fachada de coral. Se rumorea que la iglesia alguna vez albergó los restos de Cristóbal Colón y a veces se la llama la Catedral de San Cristóbal.

La importancia cultural de este sitio histórico también conserva algunas de las estructuras más grandes y magnánimas de Cuba que alguna vez fueron el hogar de las élites sociales de Cuba. Estas grandes casas estilo mansión ahora sirven como monumentos históricos y museos.

El Patio Colonial, un popular restaurante cubano en la Plaza, se encuentra en la Casa de los Marqueses de Aguas Claras, que una vez fue habitada por un descendiente de Ponce de León. Frente a este restaurante se encuentra la Casa de Lombillo, que albergó la primera oficina de correos cubana. Esta construcción ahora sirve como museo de alfabetización. Al sur de la Plaza, verás la Casa del Conde de Casa Bayona, que ahora es el Museo de Arte Colonial. Finalmente, está la Casa de los Condes de Peñalver, que ahora funciona como una de las principales galerías de arte de Cuba.

Música, tarot y otras actividades

Aunque la plaza está anclada por estas impresionantes hazañas arquitectónicas, el encanto de esta plaza del pueblo también se puede experimentar de otras maneras. El excitante zumbido de la actividad nunca termina. Siempre verás u oirás algo exclusivamente cubano mientras esté allí.

Un gran lugar para observar a la gente, es posible que vea a chicos jóvenes pateando una pelota de fútbol o artistas callejeros participando en todo tipo de entretenimiento.

Siempre hay música en vivo sonando por las calles, bares y restaurantes alrededor de la Plaza. Luego, están las mujeres cubanas adornadas con vibrantes vestimentas coloniales y tocados que se ofrecerán para hacer una tirata de cartas del tarot y ayudarte a responder preguntas acerca de tu vida y al finalizar podrás tomarte fotos con ellas.

No importa cuando vayas a la Plaza de la Catedral, seguro que encontrarás mucho que hacer y ver en este famoso sitio histórico.