Es cada vez más común apreciar el surgimiento de franquicias destinadas a la comercialización de productos y servicios relacionados con el turismo, sobretodo de agencias de viajes. Frente a esta realidad, resulta interesante conocer el proceso mediante el cual se concretan estas operaciones, que pueden convertirse en una atractiva oportunidad para los emprendedores o profesionales que busquen iniciar un negocio en el rubro turístico.

El camino hacia la compra de franquicias es complejo e insume variadas instancias comerciales y jurídicas, pero puede sintetizarse en una serie de pasos, que aquí intentaremos resumir:

• El primer punto a tener en cuenta es la elección específica del tipo de franquicia, o sea el segmento concreto en el cual vamos a trabajar. Por ejemplo, dentro de las agencias de viajes existen diferentes especialidades u orientaciones. Siempre será más adecuado optar por el sector en el que tengamos una mayor cantidad de experiencia acumulada. Si estamos comenzando, la idea más conveniente es orientarnos hacia el campo que más nos apasione.

• Una vez seleccionado el segmento de la franquicia, tendremos que acotar la búsqueda ya que encontraremos múltiples alternativas. Una idea práctica es utilizar Internet para hallar las franquicias que respondan a nuestros intereses, realizando un listado de ventajas y desventajas hasta descubrir la mejor opción.

• Otro paso crucial en el camino por hallar una franquicia que pueda aportarnos negocios rentables es efectuar una investigación de mercado a nivel local, para saber si los productos o servicios a comercializar responden a una necesidad específica de las personas que viven en esa región. Además, si el proyecto incluye la apertura de una oficina o un local comercial deberemos evaluar la zona más potable para ubicarlo, por ejemplo el barrio más conveniente dentro de una ciudad.

• Además de asegurarte que la marca que vende la franquicia se encuentra realmente posicionada en el mercado y que posee una imagen positiva, también es imprescindible confirmar el éxito del modelo de negocio que lleva a cabo, como así también si los encargados de las franquicias reciben el apoyo y la capacitación que se necesitan para operar con eficacia. Si todos estos puntos se cumplen, es probable que la adquisición de la franquicia sea realmente provechosa para todas las partes implicadas.

• Cuando se ha seleccionado una franquicia y el candidato ha superado el proceso de admisión que generalmente se aplica en estos casos, es indispensable disponer del dinero necesario para efectuar la operación. El monto variará en función del prestigio y volumen de la compañía, además de estar involucrados otros factores como el equipamiento a entregar o la ayuda que recibirá el emprendedor. Dependiendo de la cantidad de dinero a invertir, en algunos casos se requerirá financiamiento externo. Cuando esto sucede, el emprendedor hallará una mayor predisposición en los bancos a otorgar créditos con respecto a un negocio que comience de cero, debido a la seguridad que ofrece una marca ya consolidada en el mercado.

• Superados todos estos pasos, la siguiente acción es elaborar el contrato de la franquicia, que establecerá la duración de la misma y sus principales condiciones, sobretodo el detalle de los aspectos que aportará la compañía que vende la franquicia al emprendedor a cargo para que pueda desenvolverse correctamente en su actividad.

• Por último, si ya se han superado todos los puntos anteriores quedará por diseñar un plan de negocios para la franquicia, una planificación pensada a largo plazo y una estrategia de marketing que haga posible insertar al nuevo negocio en el mercado y generar su sustentabilidad. Se necesita que el emprendimiento vaya cumpliendo poco a poco los pasos necesarios para convertirse en una actividad verdaderamente rentable y con perspectivas reales de futuro.